En Tailandia no todo es lo que parece

 

Esta historia se sitúa en Tailandia, ese país del sudeste asiático que como dijo una amiga, es Disneylandia para los adultos. Es que hay de todo: fiesta, cultura, playas paradisiacas, comida exquisita y gente amable. Los tailandeses efectivamente son súper sonrientes, hospitalarios y tienen la particularidad de ser andróginos, es decir, que las diferencias físicas entre hombres y mujeres pueden ser poco notorias. Se sabe que en la calle se pueden ver mujeres locales hermosas: senos, cabello y caderas perfectas, manos finas, rasgos faciales refinados, como una barbie asiática, hasta que hablan y se oye una voz de hombre…los famosos ladyboy.

 

Philipp es un inglés de cabello castaño, ojos azules y más blanco que la leche, como todos los ingleses. Lleva 6 meses viajando por Asia, ha estado un poco por todos lados así que ya está acostumbrado a como funciona todo en esta región del mundo. El último mes decidió pasarlo en la muy divertida Tailandia; empezó viajando por el norte, por Chiang Mai, para seguir por el sur, por las paradisiacas y numerosas islas. Es así como Philipp llega a la increíble isla de Koh Phi Phi, una de las más hermosas del país, pues fue esta el escenario de la película de Leonardo DiCaprio, La Playa. La rutina aquí es muy simple, en el día se hacen excursiones a islotes vecinos, buceo, snorkeling, se toma el sol, en fin, actividades relacionadas con el mar; y en la noche las inhibiciones se dejan en el hotel y se rumbea hasta que el cuerpo aguante.

 

Después de un ajetreado día de excursiones y luego de comer, Philipp y sus amigos van a un bar y se encuentran allí con un grupo de unas 10 chicas sentadas cerca al bar. De nacionalidades muy variadas, hay monas, pelinegras, morenas, asiáticas, en fin, un coctel para todo gusto. Luego de tomarse un par de cervezas, Philipp y su amigo Sean se les acercan y entablan conversación. Philipp está embelezado con una de las chicas asiáticas, es realmente hermosa. Su pelo liso negro y largo, su cara y sus movimientos delicados, su voz suave y melodiosa, es un verdadero encanto. Se dedican a hablar gran parte de la noche y siguen bebiendo : cervezas, cocteles, shot, en fin, de todo.

 

Al cabo de un rato de charla en donde se nota el gusto mutuo, se van silenciosamente para la playa y bajo el cielo estrellado, en ese cuadro completamente romántico comienzan a darse besos intensos. Las manos se pasean por los cuerpos, las ganas aumentas así que al cabo de un rato Ning, la chica, le propone a Philipp que vayan a otro lado. Caminan de la mano hasta el hotel, parando cada 5 metros para darse más besos calientes y Philipp no se la puede creer, se esta llevando al cuarto a la nena más hermosa del grupo!

 

Alborotado como una moto y sintiéndose como el más afortunado de los mortales, abre la puerta del cuarto lo más rápido que pueda y muy sensualmente, Ning entra a la estancia. Él la mira incrédulo y empieza a desnudarla conteniendo las ganas de romperle la ropa…primero la camisa, el brassier y descubre que sus senos son la descripción misma de la perfección: redondos, en su puesto, de piel suave, una mega delicia. Sigue con la falda y se alborota aún más al ver que Ning lleva una tangita que provoca arrancársela y sin dudarlo mete la mano dentro buscando el tan deseado Monte de Venus… pero lo que encuentra es el mazo duro de Hercules.

 

What the fuck is this? Que diablos pasa aquí? Yo pensaba que eras una chica!!! 

 

Pero sí soy una chica!

 
Philipp la echo del cuarto y él quedo como novia de pueblo, (des)vestido y alborotado!

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *